La Pericana N°181
Fue un arzobispo estadounidense co- nocido por su polémica dirección del Instituto para las Obras de Religión (IOR), conocido popularmente como el Banco Vaticano. Su estatura y su com- plexión fuerte le valió el sobrenombre de El Gorila, y le permitió en 1964 tra- bajar como guardaespaldas del papa Pablo VI. Marcinkus se hizo amigo del padre Pasquale Macchi, secretario del papa, por lo que Pablo VI lo nombró obispo y, posteriormente, lo puso al frente del IOR, sin tener Marcinkus nin- guna experiencia financiera. Marcinkus fue presidente del IOR desde 1971 hasta 1989, manteniendo el control del dinero de los fondos católicos, lo que lo convirtió en uno de los hombres más poderosos en la Iglesia. 12 Viernes 8 de noviembre de 2019 Fue un banquero italiano, exconvicto y miembro de la Propaganda Due (N.º 0501), una logia secreta de la franc- masonería italiana con claras conexio- nes con la mafia siciliana. Fue fatalmente envenenado en prisión mientras cumplía una sentencia de cadena perpetua por el asesinato del abogado Giorgio Ambrosoli. Dicen que la familia Gambino – una de las cinco que controlan las activida- des del crimen organizado en Nueva York, Estados Unidos- lo eligió para administrar sus ganancias por he- roína. En 1963, Sindona ya había ad- quirido, a través de su grupo Fasco, muchos más bancos italianos, y su progreso continuó hasta el comienzo de su asociación con el Instituto para las Obras de Religión en 1969. Fue un banquero italiano. Nacido en Milán, Calvi fue presidente del Banco Ambrosiano, que se derrumbó en uno de los mayores escándalos políticos modernos de Italia. Una fuente de po- lémicas interminables, su muerte en Londres en junio de 1982 fue decla- rada homicidio después de dos pesqui- sas forenses y una investigación independiente. Su cuerpo apareció col- gado en uno de los puentes del Táme- sis. Se ha argumentado que uno de los factores de la muerte de Calvi fue su relación con el Banco del Vaticano, el accionista principal de Banco Ambro- siano, que estaba controlado por la mafia. Él pudo haber utilizado el Banco Ambrosiano para lavar dinero y la logia Propaganda Due (P2), como herra- mienta política y social. L a noticia esta vez tiene forma de libro. Anthony Raimondi, ex integrante de la mafia de Nueva York, dio detalles del supuesto plan para terminar con la vida del Sumo Pontífice, Albino Luciani, más conocido como J uan Pablo I . Luciani fue protagonista de uno de los papados más cortos de la historia . Apenas 33 días desde su asunción el 26 de agosto de 1978 hasta el 28 de septiembre, cuando su repentina muerte sacudió al mundo católico. Tal es así que su sorpresivo fallecimiento generó un sinfín de teorías conspira- tivas. Ahora, más de 40 años des- pués, un sicario apareció para alimentar una de ellas. l l l Anthony Raimondi , ex integrante de la mafia Colombo de Nueva York, re- vela en su último libro “When the Bu- llet Hits the Bone” (Cuando la bala golpea el hueso) que ayudó a asesi- nar al Sumo Pontífice con cianuro para evitar que salga a la luz un fraude millonario dentro del Vaticano. En una entrevista con el New York Post , el ex gánster afirmó que logró acceder a lugares privilegiados de la Santa Sede en 1978 gracias a su primo cardenal, el estadounidense Paul Marcinkus , quien dirigía el Banco Vaticano. l l l Raimondi, con apenas 28 años, tuvo la tarea de seguir y analizar la rutina de Juan Pablo I y definir cuál sería la mejor forma para terminar con su vida. La elegida: una taza de té lle- vada al papa por el propio Marcinkus con una fuerte dosis de Valium que lo dejó inconsciente, lo que le permitió a su primo suministrarle el cianuro. “ Co- locó el gotero en la boca del Papa y lo apretó ”, precisó Raimondi. Por temor a ir al “infierno”, el sicario ahora retirado optó por no ser él quien envenenara a Juan Pablo I. “Había hecho muchas cosas en mi tiempo, pero no quería estar allí en la habita- ción cuando mataron al papa. Sabía que eso me compraría un boleto de ida al infierno”, dijo. El plan continuó con un acting. Tras suministrar la droga, Marcinkus cerró las puertas de la habitación y esperó que una asistente encontrara al papa ya sin vida. Desde la Santa Sede ase- guran -hasta el día de hoy- que un in- farto puso fin a su existencia mientras dormía. Tenía 65 años. l l l Siempre según Raimondi, la razón de atentar contra la vida del papa se debe a que había amenazado con ex- poner un fraude financiero masivo dirigido por funcionarios del Vaticano estimado en 1.000 millones de dóla- res. De hecho, de acuerdo al mafioso, Juan Pablo I había prometido expul- sar a Marcinkus y a aproximadamente “la mitad de los cardenales y obispos”. Raimondi, además, reveló que el su- cesor de Luciani, el polaco Karol Józef Wojtyła -Juan Pablo II-, también estuvo a punto de tomar medidas sobre las irregularidades en el Banco Vaticano, pero finalmente eligió no ac- tuar al saber que su vida corría peli- gro. Otro libro: El juicio universal Un mafioso norteamericano asegura en un libro que ayudó a matar al papa P ero el mencionado no es el único libro que hace foco en el Vaticano. “El Juicio Univer- sal”, es un libro del periodista Gianluigi Nuzzi que asegura que “la situación vaticana ha empeo- rado respecto de cuando Ratzin- ger decidió dar un paso atrás y renunciar, en febrero de 2013 (abriendo el camino a la elección del argentino Jorge Bergoglio, Francisco)”. Los escándalos con- vencieron a Benedicto que era mejor convertirse en un sereno papa emérito que tratar de gober- nar lo ingobernable: la lucha in- terna entre las facciones vaticanas. l l l Nuzzi fue procesado por el Vaticano en la época de los dos primeros “Va- tileaks” y absuelto, al igual que otro difusor de documentos robados, el investigador del semanario “L’Es- presso, Emiliano Fittipaldi , que desde comienzos de octubre pasado conmovió a la Santa Sede y a la opi- nión pública con revelaciones tan graves como la de afirmar que la mayor parte del óbolo de San Pedro, las donaciones de fieles de todo el mundo al papa para los po- bres, es usado en operaciones fi- nancieras opacas , especialmente inmobiliarias, en lugar de ir a parar a los necesitados bolsillos de los últi- mos de la Tierra”. l l l Nuzzi en su libro revela una mon- Paul Casimir Marcinkus Michele Sindona Roberto Calvi “When the Bullet Hits the Bone” (Cuando la bala golpea el hueso) el libro escrito por Anthony Raimondi , ex integrante de la mafia Colombo de Nueva York. LA EXTRAÑA MUERTE DEL PAPA Viene de pág. anterior
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