La Pericana -Edición- 230 -21-11-2020
Sábado 21 de noviembre de 2020 21 economía Marcelo Delgado Economista Escribe D esde la caída del muro de Berlín en adelante, el “mercado” se fue adue- ñando de los escenarios económicos y sociales. A fines del año pasado, entre las 100 economías más importantes del mundo, se encontraban 69 empresas y 31 países. Las tecnológicas a la cabeza, como Apple, Microsoft, Google y Face- book, o las de consumo masivo, como Walt Mart, facturan al año como Argen- tina, Grecia o Turquía, y se gobiernan con un puñadito de personas, en “direc- torios” jerárquicos y funcionales a sus propios intereses. Tienen presencia en numerosos países, y se mueven con gran velocidad y facilidad. La contracara del fenómeno es la caída progresiva y sistemática de los lideraz- gos del siglo XXI. Estados Unidos y Eu- ropa no sólo han perdido espacio de influencia internacional, sino que además tienen serios problemas de gobernanza interior. El electo presidente Joe Biden promete, con cierta timidez, que América vuelva a dirigir los destinos del mundo, pero no puede explicar cómo hará para controlar los efectos de la pandemia en su país y las alternativas de competencia con China o Japón, que hace meses re- tomaron sus ritmos históricos de produc- tividad. Tampoco le será fácil superar la grieta social que deja el saliente Trump. Europa, salvo Alemania, está sumida en serios problemas de representatividad. Los jefes de estado no logran superar el 40% de aprobación y el descontento crece más que los contagios de la pan- demia. En Oriente, los liderazgos son diferentes. Se discuten menos las ideas y concep- ciones y los procesos involucran a gene- raciones enteras. Así las cosas, no hay dudas que el pa- sado ya no vuelve. La pandemia solo aceleró algunos aspectos del cambio, que se viene gestando desde comienzos del siglo XXI, pero es inexorable, progre- sivo e irreversible. Hasta acá, queda fun- damentada la idea de “Transición”. La incertidumbre encuentra muchos moti- vos de existencia. El primero se vincula al déficit de personas, movimientos y líde- res que puedan poner en palabras el “nuevo mundo” que se encuentra al final del puente. Hay algunas mega-tenden- cias que lo pintan como el impacto de la tecnología, la inteligencia artificial, el mayor respeto y cuidado del ambiente y una vida más austera, entre otras. Pero Una transición a la incertidumbre no aparece aún en el horizonte, una con- figuración completa, integral, positiva y alentadora del modelo. El efecto inmediato es buscar segurida- des en el pasado, entonces los agentes económicos se perfilan en el corto plazo; las familias programan horizontes próxi- mos: los Estados campean la coyuntura y en general se incrementan las tensiones. Resulta necesario, con urgencia, y con paciencia; comenzar a develar este mis- terio para reducir la incertidumbre (que es riesgo), comenzar a planificar conduc- tas y recursos en el mediano y largo plazo y proyectarse de manera positiva, a un futuro próximo, que reclama ser cons- truido, compartido y disfrutado. ¿Lo podremos hacer? Claro que sí.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NzQxMjQ=