La Pericana 245 del 03-04-2021

PASA A PÁGINA SIGUIENTE tos médicos para que pudiera seguir ju- gando amistosos y recaudar dinero. “El año pasado me lesioné jugando con- tra Colombia. No podía jugar más. Pero el club recibía dinero si yo es- taba en la cancha y tuve que conti- nuar jugando” , le dijo al diario Folha de San Pablo en 1964. Aunque pidió regresar a Brasil para po- derse tratar, el Botafogo decidió que se sumara al plantel para una gira por Eu- ropa, a donde llegó muy maltrecho. “Jugué siete partidos infil- trado. No me molestaba, pero de re- pente noté que la pierna comenzaba a atrofiarse. Quise parar para cu- rarme pero el médico exigía cuarenta días para jugar y el club no aceptó” , continuó. lll El otro problema eran los constantes incumplimientos del Botafogo a la hora de pagarle el sueldo, y eso le com- plicaba mucho su ya difícil situación fa- miliar. Había acordado una ficha de diez millones de cruzeiros, pero solo le ha- bían pagado 30.000 y tampoco había cobrado las primas desde que se había lesionado por no disputar esos parti- dos. “Mi salario es de 150.000 cruzei- ros de los que 120.000 debo darle a mi ex esposa Nair y a las niñas por orden del juez”, explicó. lll En Botafogo jugó hasta 1967, un año después de haber disputado el Mundial de Inglaterra 1966 en el que Brasil no pudo pasar de la primera rueda, y buena parte de la prensa consideró que había varios jugadores que ya no estaban al mismo nivel que antes. Con el equipo carioca jugó un total de 614 partidos, con 245 goles, y ganó cinco títulos, tres torneos cariocas y dos Río-San Pablo. Pasó entonces al Corinthians, aunque ya su desempeño en el equipo paulista no fue el mismo de antes, y al año si- guiente se fue a jugar al Junior de Ba- rranquilla en Colombia y después pasó por el Portuguesa Santista, el Flamengo –donde según contó Zagallo en la TV, un entrenador le llegó a prohibir la gambeta y lo aceptó por temor a perder su lugar en el equipo-, emigró a Francia para jugar por el Red Star París en 1971, y en 1972 regresó a Brasil para vestir la camiseta del modesto Olaria, donde se retiró. lll En 1962, con 29 años, ya tenía siete hijos con su mujer Nair Marques, a quien conoció en la adolescencia, cuando inició un sonado romance con la popular cantante de samba Elza Soa- res , lo que provocó la ruptura de su ma- trimonio, y con esto, numerosas críticas de la sociedad, que tampoco aceptaba que la artista lo mantuviera económica- mente. “Desde la tribuna me gritaban ‘gigoló’, y aunque no sabía lo que significaba, me sonaba ofensivo, así que me dio vergüenza hablarlo con mis compañeros. Le pregunté a Elza y ella me lo explicó. Yo no le hago mal a nadie, pero no me dejan vivir mi vida. No voy a desatender nunca a mis hijas y a Nair, pero quiero compartir mi vida con la persona que amo” , sostuvo Ga- rrincha , que de todos modos, comenzó a refugiarse en el alcohol. Sábado 3 de abril de 2021 7 s En 1974 sus ex compañeros le hicieron un partido homenaje en el Maracaná para ayudarlo económicamente En el Mundial de Inglaterra 1966, Brasil no pudo pasar de la primera rueda. La se- lección brasi- leña en el Goodison Park, de Li- verpool El psicólogo de la selección brasileña consideraba que Garrincha era “un débil mental, no apto para desenvolverse en un juego colectivo” y en los test psicofísicos sacó 38 puntos sobre los 123 necesarios para subirse al avión hacia el mundial de Suecia.

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