El Nuevo Diario -Edición- 1923 -31-07-2020

Viernes 31 de julio de 2020 16 MARÍA FILOMENA NORIEGA, ABOGADA DEL ACUSADO POR EL HOMICIDIO DE RUBÉN QUIROGA La abogada penalista sostuvo que Luis Montaño estaba cansado de ser el “hazmerreír” del pueblo y que tenía previsto separarse de Glenda Aciar, a quien sindica como la culpable del homicidio de Quiroga. E l miércoles pasado, la abogada María Filomena Noriega pre- sentó un pedido de cambio de calificación de “homicidio agravado por alevosía” a “encubrimiento” para su re- presentado Luis Montaño, imputado por el crimen de Rubén Quiroga, ocu- rrido en Iglesia. La abogada sostuvo que Montaño es- taba cansado de las infidelidades de Aciar, por lo que había decidido sepa- rarse, pero que él no mató a Quiroga. –¿En qué funda su pedido de cam- bio de calificación para su cliente Luis Montaño? – Mi cliente declaró en indagatoria, aproximadamente 12 horas. El juez y el fiscal hicieron preguntas incisivas y él las contestó tranquilamente. Tengo todas las constancias en autos, inclu- sive las llamadas desgrabadas. La par- ticipación de mi cliente ha sido encubrimiento y no participación prima- ria en homicidio. –Aciar declaró que Montaño había citado a Quiroga, que lo golpeó con un hierro y luego lo roció con nafta, quemó el cadáver. ¿Qué dijo Mon- taño sobre esto? –Mi cliente dijo, y está en el expe- diente, que había tomado la decisión de dejar a la señora Glenda por infide- lidades constantes, que están acredita- das en el expediente. La señora tenía aproximadamente cinco relaciones ex- tramatrimoniales contemporáneas, entre los cuales se encuentra el difunto señor Quiroga. –O sea que tenía cuatro amantes más. –Sí, inclusive salía con un tío de ella, al que también le cobraba y extorsio- naba, que está acreditado en el expe- diente. Él era el hazmerreír del pueblo, por así decirlo, por eso toma la deci- sión de dejarla y arreglar la cuota ali- mentaria para seguir viendo a su hija, para ser un padre presente. Él declara que fue a buscar sus cosas para irse a vivir con sus padres y no la encontró, encontró a la menor sola en su casa y entonces pensó que había tomado una decisión drástica o que lo seguía enga- ñando. –¿Ahí la encontró con el cuerpo de Quiroga? – Ve como una fogata cerca del domi- cilio y se arrima. Ahí la encontró a Glenda que estaba quemando algo y ve que era un cuerpo humano. Él no entendía nada y ella le dijo que espe- rara, que ya le iba a contar bien. Fue y trajo unas maderas que él tenía para hacer una sillita a su hija, echa las cosas de una mochila entre las made- ras, y lo invita a irse a la casa. Cuando prende la luz, ve que estaba toda en- sangrentada. Se fue a lavar porque tenía que darle de mamar a la hija y luego le cuenta que Quiroga se comu- nicó con ella para tener relaciones se- “La señora de mi cliente tenía cinco relaciones extramatrimoniales” Rubén Quiroga, el hombre asesinado.