El Nuevo Diario - page 5

lencia que emplearon en contra de la em-
presa que “supuestamente” defienden, pero
más grave aún, acorralando cobardemente
a un hombre solo, indefenso, que no podía
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Viernes 23 de febrero de 2018
nivel de agresión fue de tal magnitud, que el
abogado de la empresa, visiblemente con-
mocionado por la violencia que se desple-
gaba a su alrededor y la amenaza a su
integridad física, comenzó a sentir una des-
compensación, que fue advertida por mu-
chos de los presentes; aun así, continuaron
sus ataques y reclamos salvajes.
Al mismo tiempo que lo insultaban, porque
pretendían que Pons firmara un documento
que el funcionario se negaba a formalizar,
los integrantes del grupo de ATE se encar-
gaban de destrozar todo dentro del SUM.
De hecho, en las fotografías y en las filma-
ciones de las cámaras de seguridad, se
puede apreciar el grado de salvajismo y vio-
U
na nueva arremetida de los violen-
tos que han tomado virtualmente de
rehenes a los trabajadores de Yaci-
miento Carbonífero Río Turbio (YCRT), se
produjo el jueves pasado en las oficinas de
la empresa, con el lamentable saldo de una
persona afectada gravemente en su salud.
La acción vandálica se le adjudica a un
grupo que dice representar a ATE y a raíz
de esto el abogado sanjuanino Juan Pons
sufrió una grave descompensación; estuvo
internado en Terapia intensiva del hospital
de la cuenca y los médicos que lograron es-
tabilizarlo, aconsejaron su derivación con
urgencia a Buenos Aires.
Pons,
que se desempeña como
subge-
rente de Asuntos Jurídicos de YCRT
, se
encuentra internado en terapia intensiva del
Instituto Cardiológico Buenos Aires –ICBA- .
El hecho comenzó pasado el mediodía del
jueves 8 de febrero, cuando Pons recibió al
secretario de ATE Río Turbio, Miguel Páez,
quien le había solicitado la reunión, con el
fin de conversar sobre aspectos de la crisis
que vive la empresa. El dirigente gremial le
pidió al funcionario que lo acompañara al
SUM (Salón de Usos Múltiples) porque
“iban a estar más cómodos” y cuando llega-
ron al lugar, había allí reunidas unas cin-
cuenta personas (hombres y mujeres) que
verbalizaban todo tipo de reclamos, impro-
perios, insultos de grueso calibre y agresio-
nes hacia la Intervención, pero también
hacia el funcionario quien había respondido
amablemente a la requisitoria de ATE.
Los hechos
S
egún relató el gerente de Asuntos
Jurídicos de la empresa,
el también
sanjuanino Andrés Aguilar
, el
-¿Cuál es el estado de salud de Juan
Pons?
-Él sufrió un infarto en la reunión con los
sindicalistas, no quisieron darle ni agua,
alguien salió y le avisó a la médica labora-
lista, que al entrar ordenó que lo dejaran
salir. Logró estabilizarlo y llamó a la am-
bulancia.
-¿Qué pasó con la ambulancia?
-Este es otro hecho que está bajo investi-
gación. La ambulancia está a cien metros
del lugar de la reunión pero nunca llegó,
razón por la cual hemos presentado una
denuncia para que se investigue el aban-
dono de persona.
-¿Cómo está la salud de Pons?
-Está internado en unidad coronaria del
JUAN PONS, SUBGERENTE DE ASUNTOS JURÍDICOS DEL YACIMIENTO RÍO TURBIO
Discutió con sindicalistas y
quedó al borde de la muerte
El abogado
sanjuanino
Juan Pons
se encuentra
hospitalizado
en Buenos
Aires, debido
a un
problema de
salud
originado por
una fuerte
agresión
recibida por
sindicalistas.
Andrés Aguilar – Jefe de Asuntos Jurídicos de YCRT
“El estado de salud del doctor Pons es delicado”
ICBA, en Capital Federal, se encuentra
en estado resevado, es complejo porque
sufrió un infarto y analizan si esta semana
lo intervienen quirúrgicamente. Si tengo
que decir cómo está, más allá de su buen
ánimo, está delicado. Le van a hacer un
cateterismo y le van a colocar un stent.
Tras una tensa discusión con un centenar de
sindicalistas y empleados de la empresa, se
descompensó. Le negaron asistencia. La ambulancia
nunca llegó. Lo trasladaron a Buenos Aires.
Lo intervendrán tras el infarto que sufrió.
procesar todo ese nivel de violencia desa-
tado en contra de él.
En ese momento, una de las mujeres del
grupo advirtió que Pons era víctima de una
descompensación; transpiraba y palidecía
casi al borde del desmayo.
En esa instancia, el subgerente fue atendido
por personal médico de la empresa, lo colo-
caron en una silla de ruedas y lo alistaron
para llevarlo al hospital de la localidad.
Desde YCRT, entonces, llamaron a la guar-
dia médica del hospital de Río Turbio, pi-
diéndole una ambulancia para el traslado
del paciente y aun cuando solo hay algo
más de 100 metros hasta el nosocomio, el
doctor Escalante, médico de turno, les negó
la asistencia y dijo, ante la sorpresa de
quien lo había llamado, que
“no les iba a
mandar la ambulancia
”.
Inmediatamente Marcela Lillio, médica de
YCRT, llamó a la ambulancia de la empresa,
apostada en el módulo 5, a unos 7 kilóme-
tros de distancia y luego de varios minutos,
Pons pudo ser trasladado al hospital para su
atención y posteriormente trasladado en un
vuelo sanitario a Capital Federal.
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