30
democracia
Añosde
y los partidos
La política
D
éjenme empezar recordando lo que dijo al
respecto Cristina Fernández de Kirchner
hace exactamente un año:
“Importa mucho
una vez más lo que es imprescindible para tener no
solamente 29 años de democracia, sino 100, 200 o
300: la unidad del pueblo, de los trabajadores, de los
científicos, de los intelectuales, de los artistas, de los
estudiantes, de los profesionales, de los agricultores,
de los campesinos, de los productores, de los empre-
sarios, esta unidad nacional imprescindible para se-
guir creciendo”.
● ● ●
Hoy estamos viviendo el período de democracia inin-
terrumpida más extenso en la historia de nuestro
país: 30 años. ¿Y sabe qué ha ocurrido? Que en
estas tres décadas las instituciones resistieron a pie
firme, el andamiaje democrático no se quebró ni se
trizó, y hoy ni al más trasnochado de nuestros compa-
triotas se le ocurriría acudir a otra forma de superar
desafíos y mejorar su vida si no es a través del voto.
Creo que aprendimos algo fundamental y es que
la
condición natural de los argentinos es vivir en de-
mocracia
. Y no cualquier democracia, sino una de-
mocracia representativa, republicana, plural, con una
Justicia independiente y los controles que fija nuestra
Constitución. El resultado de ello es que, hoy, cual-
quier compatriota puede o no estar a favor del go-
bierno de turno, pero igual siente que es “su”
gobierno, porque lo eligieron millones de personas
que pueden pensar distinto, pero tienen el derecho a
hacerlo.
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Y aquí hay que destacar algo crucial: de estas inten-
sas tres décadas democráticas, la última es vital, por-
que corresponde a un proyecto que ha cambiado el
presente y el futuro del país, y nos distancia para
siempre de un pasado abyecto. Un pasado que no
sólo nos hundió en la más negra de las noches res-
pecto a derechos humanos, sino también en un pro-
fundo abismo económico, productivo y, lo que es más
tremendo aun, en un enorme abismo de fe.
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Nosotros llegamos a San Juan de la mano de José
Luis Gioja en los peores momentos de la crisis, y lo
hicimos empujados por la desesperanza, la angustia y
el dolor de cientos de miles de sanjuaninos. Siempre
tendré grabado cuando en uno de sus tradicionales
mensajes anuales ante los legisladores provinciales,
el gobernador recordó que “
en diciembre del 2003 no
estábamos en cero, sino en menos diez
”. Para mí, ahí
radica la clave de la revolución productiva que se
llevó a cabo en San Juan: consolidada la democracia,
el proyecto debía pasar por hacer lo que hicimos.
Esto es menos cháchara política y mucho brazo arre-
mangado remando para el mismo lado.
Gioja siempre lo supo: en las incontables horas en
que compartimos juntos, él siempre ha sostenido que
cuando la gente ya se siente segura de que no hay ni
un milímetro de espacio para los sables, la percepción
y expectativas de la sociedad apuntan ineludible-
mente a la cuestión económica y social.
Por
Walter Lima*
El abrazo de Néstor
Kirchner y Cristina
Fernández, ante una multitud
Viernes 3 de enero de 2014
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La Constitución Nacional de 1986 dio exclusividad
a los partidos políticos para presentar candidatos.
En estos 30 años, pasaron por épocas que convo-
caban multitudes a otras que eran mirados de
reojo y parte de la población pedía que se vayan
todos. En los últimos años, volvió la militancia y
también regresaron las profundas diferencias
entre diferentes sectores.
En aquel momento, cuando empezamos, la negativa
experiencia de las personas era el cortoplacismo de
sucesivos gobiernos y las crisis recurrentes, causa-
das por esa permanente improvisación. Y fue justo
en aquel momento cuando comienza a perfilarse el
Proyecto Nacional y Popular de Néstor y el de la 2º
Reconstrucción sanjuanina de José Luis. Y junto con
ello, el retorno inevitable de un paradigma que es
profundamente argentino, tal vez porque incluya una
importante dosis de socarronería y humor de pueblo:
a los peronistas no todos nos quieren, pero cuando
hay una crisis a los primeros que llaman es a noso-
tros…
● ● ●
Pero déjeme explicar estos años con sólo cuatro
datos que hablan por sí mismos. Mire, en el 2003, el
85% de los fondos circulantes en la provincia prove-
nían de recursos nacionales, mientras que en el
2012 sólo el 69% tuvo ese origen. Eso quiere decir
que San Juan está generando cada vez más sus pro-
pios recursos. Segundo dato: entre el 2011 y 2012,
San Juan creció un 5% promedio anual, lo que quin-
tuplica el 1% de la economía brasilera y supera en
más del doble al ya importante 2% de la Argentina.
Tercer dato: ya por el 2011 la desocupación llegó al
índice más bajo de la historia provincial y nunca más
volvió a subir. Y para terminar: nuestro Producto
Bruto Geográfico creció el 163% entre el 2003 al
2012, o sea que generamos ¡un San Juan y medio
nuevo! en esta década.
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H
oy, mientras esperamos con mucha ilusión el
rápido regreso del gobernador a sus funcio-
nes, el proyecto del “San Juan del millón de
habitantes” está en plena marcha y los instrumentos
de planificación para diseñar el San Juan de las pró-
ximas décadas ya nos permiten empezar a atisbar el
futuro.
En definitiva, podemos pensar en estos 30 años de
democracia ininterrumpida como un aprendizaje co-
munitario que ha venido revinculando a la sociedad y
el estado en un inédito proceso de inclusión social
económica y a los últimos 10 años, como un ejemplo
–como dice José Luis a quien lo quiera escuchar- del
“esfuerzo bien focalizado, sin improvisación, que reu-
nió las mejores políticas de sustento socioeconómico
del gobierno nacional con nuestra inquebrantable vo-
luntad de dar oportunidades, progreso e inclusión a
toda nuestra gente”.
la condición natural
de los argentinos
es la democracia
*Secretario General
de la Gobernación
