Viernes 5 de febrero de 2016
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GUSTAVO ALCALÁ, MÉDICO CARDIÓLOGO
El médico Gustavo Alcalá
afirma que la gente entró en
pánico con los virus transmiti-
dos por los mosquitos porque
no se informa bien de los pe-
ligros reales. Y que hay inte-
reses detrás de crear un
temor irracional.
A
l médico cardiólogo Gustavo Al-
calá le gusta hablar sin dar ro-
deos. Como columnista del
programa La Ventana, es reconocido por
plantear los temas “sin anestesia”. En
tiempos en que la población está alar-
mada y pagando precios exorbitantes por
repelentes, el médico explica qué hay que
tener en cuenta.
—Hay un gran miedo por los virus
transmitidos por mosquitos ¿es tan
grave la situación?
—Las enfermedades infecciosas siempre
tuvieron un halo de gravedad. Lo primero
que hay que distinguir es saber cuántos
casos confirmados hay de dengue y de
zika y cuáles son graves. Porque enferme-
dades virales hay muchas y no son tantas
las que traen consecuencias.
—Hay casos confirmados…
—No hay relación entre el temor irracional
y las medidas que hay que tomar. Por
ejemplo, no es lo mismo vivir en la Pata-
gonia que en la selva misionera. Estos
virus aparecen porque desaparecen las
selvas. Por lo que los mosquitos se trasla-
dan a las urbes con estas consecuencias.
En donde no hay selva en Argentina, es
difícil que sea grave.
—¿Y por qué entramos todos en pá-
nico?
—Porque el pánico vende, compramos
todo lo que sale y se entra en pánico. Se
dice “habría tantos casos en Misiones”,
bueno avisen cuando tengan los casos
confirmados y recién ahí debemos tomar
decisiones. Eso de dar asueto en Misiones
para limpiar los fondos de las casas suena
a una avivada para no trabajar. Esa me-
dida no va a disminuir nada el problema y
van a seguir existiendo los mosquitos
como hace miles de años.
—¿Hay posibilidades que ese virus se
instale en San Juan?
—Ese es otro punto a analizar, las comu-
nicaciones. Este virus viene desde África y
es importante diferenciar casos locales, de
quienes se contagien en San Juan de los
que se contagien en Brasil o Colombia. El
virus se transmite cuando un determinado
tipo de mosquito pica a alguien que está
infectado y después pica a alguien que
“
”
Estos virus aparecen por-
que desaparecen las selvas.
Los mosquitos van a las
urbes con estas consecuen-
cias. Donde no hay selva,
es difícil que sea grave.
“Se está exagerando
con el dengue y el zika”
Lo que hay que
saber del dengue
está sin infección.
—¿Cuánto puede durar el virus?
—La gente está más atenta a las
cuestiones episódicas. El mosquito
no está todo el año y el principal
factor que se encargará de esto es
el clima. No habrá casos en in-
vierno, se tomen medidas o no y
volverán los casos cuando regrese
el calor y los mosquitos.
—¿Hay que hacer grandes campa-
ñas?
— Esto sirve para los organismos inter-
nacionales de salud para recaudar fondos
en forma más rápida. No discuto que hay que
tomar medidas, que la infección está y hay
cierto grado de riesgo. Pero es evidente que
se está exagerando la nota. Si es una catás-
trofe para lugares turísticos porque irá menos
gente.
—¿Qué debería hacerse?
—Hay que darle a la gente mensajes concre-
tos de lo que puede hacer y verificar si va a
viajar, que no sea a un lugar en donde circula
el virus. Esa es la medida preventiva más im-
portante, pero como hay intereses económi-
cos en juego con lo que genera el turismo,
esos datos no se difunden tanto. Y más allá
de eso, hay que evitar que piquen los mosqui-
tos y evitar agua estancada. Y otro tema im-
portante es leer la información completa, no
leer sólo títulos sensacionalistas.
—En San Juan se habla de un posible caso
de una persona que estuvo en Bolivia…
—Que alguien tenga dengue y se encuentre
aislado, es como un virus más. Hay que estar
atento a los casos graves de dengue, los que
deben internarse. Creo que las informaciones
sobre dengue van a pasar más rápido que las
de ébola.
El
culpable
E
l mosquito
Aedes
aegypti
vive en
hábitats urbanos y
se reproduce principal-
mente en recipientes arti-
ficiales. A diferencia de
otros mosquitos, este se
alimenta durante el día;
los periodos en que se in-
tensifican las picaduras
son el principio de la ma-
ñana y el atardecer, antes
de que oscurezca. En
cada periodo de alimenta-
ción, el mosquito hembra
pica a muchas personas
La infección causa síntomas gri-
pales. En ocasiones puede con-
vertirse en mortal (dengue grave).
En 2013, se notificaron 2,35 mi-
llones de casos en la Región de
las Américas; 37.687 fueron de
dengue grave.
Cada año, unas 500.000 personas
que padecen dengue grave —
niños en su mayoría— necesitan hos-
pitalización. Casi un 2,5% fallecen.
No hay tratamiento específico
del dengue ni del dengue grave,
pero la detección oportuna y el ac-
ceso a la asistencia médica ade-
cuada disminuyen las tasas de
mortalidad por debajo del 1%.
La enfermedad por el virus de Zika
suele ser leve y no necesita trata-
miento específico. Los pacientes
deben estar en reposo, beber lí-
quido y tomar analgésicos co-
munes para el dolor. Si los
síntomas empeoran deben
consultar al médico.
Los organismos que
están investigando
estos brotes encontraron
pruebas cada vez más nu-
merosas de una relación
entre el virus de Zika y la
microcefalia, aunque son ne-
cesarias más investigaciones
para entender esa relación. Asi-
mismo, se están investigando
otras causas posibles.
Evitar que los mosquitos encuen-
tren lugares donde depositar sus
huevecillos
Eliminar correctamente los desechos
sólidos y los posibles hábitats artifi-
ciales
Cubrir, vaciar y limpiar cada se-
mana los recipientes donde se al-
macena agua para uso doméstico:
Aplicar insecticidas adecuados a los
recipientes en que se almacena agua
a la intemperie
Realizar protección personal en el
hogar, como mosquiteros en las
ventanas, usar ropa de manga larga,
materiales tratados con insecticidas,
espirales y vaporizadores;
Lo que hay que
saber del Zika
Lo que hay
que hacer
