Viernes 29 de abril de 2016
Escribe
Eduardo Quattropani*
temas de la justicia
Narcotráfico: O aprendemos
o nos llevan puestos
El tema del narcotráfico, del que
ya nos hemos ocupado en este
espacio, sigue y seguirá siendo mo-
tivo de análisis, pues constituye por sí
un problema grave pero que, ade-
más, contamina muchos otros con
sus consecuencias.
De lo que se debe estar contestes
–sin duda alguna- es que no
existe ni ha existido jamás una verda-
dera, seria y razonable Política de Es-
tado en la materia.
Que hoy es el momento –nueva-
mente- de preguntarse si ¿habrá
política criminal contra el narcotráfico
o si nos limitaremos a hacer política
con el narcotráfico?
Que como punto de partida debe
aceptarse que “
la territorializa-
ción
” de los organismos de persecu-
ción penal son factor clave para el
éxito, así lo marca, por ejemplo, la ex-
periencia salteña.
Que por ello debe aceptarse, sin
temor alguno, el inevitable fracaso
de los organismos de la Justicia Fe-
deral,
ello causado por la absoluta
imposibilidad estructural de ha-
cerse cargo de la lucha contra el
microtráfico.
Por ello se dijo, en el marco del I
Congreso sobre Narcocriminalidad,
llevado a cabo en Ciudad Autónoma
el 21 de abril de 2016, y organizado
por los Ministerios Públicos Fiscales
del País:
1 -
Necesidad de terminar con el es-
tado de evolución aleatoria del régi-
men de desfederalización (Ley N°
26.052 del año 2005).
2 -
Necesidad de concretar pautas
de financiamiento.
3 -
Necesidad de articular, desde el
Ministerio de Justicia de la Nación,
un sistema de análisis criminal sobre
narcotráfico.
4 -
Necesidad de definir una red de
laboratorios de toxicología de apro-
vechamiento común para la justicia
provincial y federal.
5 -
Necesidad de diseñar un meca-
nismo de financiamiento para la co-
rrespondiente asignación
presupuestaria a las provincias que
se sumen a la lucha contra el nar-
cotráfico.
6 -
La necesidad de abordar la pro-
blemática de la regionalización.
7 -
La problemática de la política cri-
minal y la reforma procesal.
8 -
La problemática de la política cri-
minal y la creación de una agencia
antidrogas.
Conclusión necesaria de ello es:
A -
Un futuro de mejoramiento de la
persecución del narcotráfico exige la
actualización de las estructuras del
Ministerio Público Fiscal Federal y
una fluida relación de ellas con los
Ministerios Públicos Fiscales de
Provincias, en un marco de desfe-
deralización que implique esfuerzos
compartidos.
B -
El problema del narcotráfico ha
crecido demasiado como para que
se incurra en la ingenuidad de tomar
decisiones que no coinciden con la
urgencia imperante, por eso dejo
como reflexión final que deben
adoptarse los criterios de solución
que resulten adecuados a la hora y
aplicarse sin demora las herramien-
tas disponibles, en ese aspecto la
desfederalización parece el camino
adecuado.
Observación:
Asumo que en San
Juan se torna difícil entender de lo
que se habla en el país, nuestro
atraso procesal nos “invita peligro-
samente” a hacer siempre, más o
menos, lo mismo, con lo que el re-
sultado, también, es más o menos
el mismo.
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COLUMNISTAS
algo de alguien
Dicen que dijo
C
uando algún dicho o frase
que nos parece interesante,
queremos que sea tenida
en cuenta, bien oída y se la consi-
dere, muchas veces se nos ocurre
endilgársela a alguien famoso o
importante, cuya palabra sea in-
cuestionable.
Preferentemente, alguien que ya
no esté en este mundo actual,
donde se cuestiona todo. Menos a
los muertos, como si, por mirar las
margaritas desde abajo pasaran a
ser héroes, santos o sabios. Sim-
plemente, ya no están; el más allá
no es un baño de agua bendita, ni
automáticamente convierte en
sabio a quienes pasan su umbral.
Pero, volviendo a nuestro tema,
como, en general, tienen buen
marketing, nadie cuestiona su ve-
racidad, y el que la cuestione, que
vaya preguntarle al difunto. ¿Cómo
saber si es cierto que Churchill dijo
todo lo que dicen que dijo?
Siempre hay un intermediario que
es quien “dice que dijo” la frase en
cuestión. Puede ser un historiador,
un religioso, o, simplemente, un
ocurrente que le atribuyó algo a al-
guien. Si tiene halo de intelectual,
más creíble y, entonces, hasta es
citado en las apostillas.
Según sea el tema, podemos adju-
dicarle la frase a Gardel, Perón,
Favaloro, Sarmiento, Borges o San
Martín. También se suele citar a La
Madre Teresa, Einstein, El Papa,
Gandhi o Bill Gates.
Como no soy memorioso ni estu-
diado, tuve que recurrir a una
abuelita que tenía la experiencia de
años, la picardía andaluza y el
saber germano; que era diestra en
cien artes y pasó por mil penurias;
que conoció a medio mundo y que
nunca existió más que en mi imagi-
nación.
Me viene bien porque a ella recurro
siempre que quiero mandarme la
parte con alguna ocurrencia; así no
llevo otro cargo más de conciencia
por adjudicar algún dicho a quien
no corresponda.
s
Vicepresidente Primero del
Consejo Federal de Política Cri-
minal de los Ministerios Públi-
cos de la República Argentina
Gustavo Ruckschloss
