Viernes 29 de septiembre de 2017
Escribe
Eduardo Quattropani*
temas de la justicia
s
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COLUMNISTAS
algo de alguien
Dolor y vergüenza
N
ada nuevo, más de lo
mismo, siempre igual.
Peor no se puede.
Papeles de aquí para allá, cambio
de caras o lugares, y el mismo re-
sultado.
Cuando no hay, no hay. Cuando no
se quiere, no se quiere. Cuando
no hay ganas ni se quiere resolver
algo, todo sigue igual.
En otro aniversario de la desapari-
ción de mi amigo Raúl Tellechea,
seguimos en la inentendible mezcla
de ineficiencia, corrupción y falta
de ganas de concretar resultados.
Se le ponga el nombre que se le
ponga o en el lugar que lo pongan.
Me indigna cualquier injusticia, en
cualquier lado, pero esta, me
duele. ¿Qué madre, qué hijo, qué
amigo soporta trece años de tinie-
blas y desvergüenzas?
Si alguna vez se corre el telón y
aparece luz ¿quién les saca los
años de dolor? ¿qué se reparará?.
Un castigo tarde y malnacido solo
sirve para mayor indignación.
Es inconcebible que alguien no
haya dado siquiera una limosna de
justicia.
Memorial a Raúl Tellechea, obra de
Hugo Vinzio, ubicado en la Asociación
Mutual del Personal de la UNSJ)
s
(*) Fiscal General de la Corte de Justicia
Ex Presidente del Consejo de Procuradores, Fiscales, Defen-
sores y Asesores Generales de la República Argentina
Ex Presidente del Consejo Federal de Política Criminal de
los Ministerios Públicos de la República Argentina
Ex Presidente del Foro de Abogados de la Pcia. de San Juan
Escribe
Gustavo Ruckschloss
A
l cumplirse 33 días hábiles
desde que se implementó el
sistema especial de Fla-
grancia un número tiene, creo yo, la
capacidad de conmover la historia
de las estadísticas del Poder Judi-
cial de San Juan en materia penal,
ese número está dado por la canti-
dad de personas sentenciadas en
ese corto lapso.
En efecto, al día en que escribo
está esta columna, miércoles 27, se
han sentenciado a 103 ciudadanos
que fueron aprehendidos por la Po-
licía de la provincia en situación de
Flagrancia. De esos números
deben sacarse, como mínimo, las
siguientes relativas conclusiones:
A) La prevención por parte de la
Policía está siendo evidentemente
efectiva
B) Los dispositivos tecnológicos im-
plementados por la provincia para
prevenir el delito están sirviendo de
efectivo apoyo, también, a la labor
efectiva de los fiscales
C) La presencia de los ayudantes
fiscales trabajando en el campo de
operaciones dirigiendo la investiga-
ción ha resultado un factor determi-
nante para una mayor calidad y
para desalentar denuncias infunda-
das contra el accionar policial
D) La estructura jurisdiccional y ad-
ministrativa prevista por la ley de
creación se ha verificado como su-
ficiente para enfrentar el desafío.
Queda claro que persisten algunos
contratiempos dados en especial
por la falta de comprehensión del
nuevo paradigma que trae ínsito el
sistema acusatorio, verificándose
ello en la resistencia de algunos en
entender la idea de la justicia con-
sensual, así como de entender de-
finitivamente que la
reglamentación sobre la acción
penal y de absoluta competencia
provincial y en consecuencia de
ello por imperio de la misma ley de
Flagrancia su disponibilidad reco-
nocen la titularidad en cabeza de
los fiscales.
El protagonismo pero también el
trabajo más pesado del sistema
recae en la figura de los fiscales,
mejor dicho en especial en los ayu-
dantes fiscales quienes son los
que deben encontrar, fruto de la in-
vestigación, elementos probatorios
que los habilite a formular cargos
contra una persona y, en su caso,
oportunamente hacer valer una
pretensión punitiva. Legislar e im-
plementar sistema de ninguna ma-
nera resulta ser una carga
demasiado pesada, la clave está
en poder cambiar culturas jurídicas
vigentes de evidentes signos primi-
tivos, dificultad que no reconoce,
necesariamente, como agravante
la edad de los operadores sino la
posibilidad de estos de entender
los institutos del nuevo derecho
penal, entendimiento que debe ser
integral y de modo alguno parcial
so-pena de producir intolerables
descalabros en el sistema.
Efectividad absoluta