rio, nos ha transformado a todos en
más pobres. Son las consecuen-
cias de los desaciertos en materia
económica.
Si se pregunta hoy quién es el
ministro de Economía del país
y el presidente del Banco Central,
no se estaría equivocado si la res-
puesta es el jefe de la misión en Ar-
gentina del Fondo Monetario
Internacional (FMI), Roberto Carda-
relli, por lo que es importante saber
qué opina. Según declaraciones de
hace unos meses, afirmó que es
importante para el ahorro y las in-
Viernes 28 de septiembre de 2018
¿El FMI se hizo cargo del
Ministerio de Economía?
E
l martes pasado, el foco de
atención del país pasó rápi-
damente de la repercusión
del paro general, a la renuncia
como presidente del Banco Central
de Luis Caputo. Se dejó de hablar
de la CGT, la CTA, los gremialistas
y si se trabajaba o no, a prestar
atención a la reacción del dólar tras
la ida del Gobierno del “Messi” de
las finanzas, como llegaron a cata-
logarlo, a pesar que en tres meses
recibió un país con un dólar de 28
pesos y tasas del 40% para irse
con un dólar de 40 pesos y tasas
superiores al 60%.
Decir que Caputo se fue por
problemas con Nicolás Du-
jovne, es absurdo. Más allá que se
criticaban sin disimularlo. Caputo
podría haber seguido en su cargo...
si hacía lo que el Fondo Monetario
Internacional le había impuesto al
país como condiciones para que
llegara el préstamo. Y si Roberto
Cardarelli, el economista italiano
que trabaja en el FMI y es el encar-
gado de auditar las cuentas del
país, exige que no se utilice la
plata del Fondo para parar la esca-
lada del dólar, no hay que echarle
la culpa del FMI. No nos podemos
enojar por las condiciones que nos
impone quien nos presta plata.
Nadie nos obligó a endeudarnos y
tener déficit fiscales que hacen ne-
cesario buscar, como único salvavi-
das, la plata del organismo
internacional.
Si usted tiene fama de mal
pagador y le pide plata a un
amigo para hacer inversiones que
le permitan mejorar sus ingresos y
después destina el dinero en irse
de vacaciones con su familia, no se
enoje si su amigo se niega a darle
más plata. En este caso es lo
mismo, si vamos al FMI, tenemos
que cumplir con lo que nos piden.
Y la salida de Caputo es la eviden-
cia palpable que la economía mo-
netaria del país la maneja el FMI.
Más allá de la impotencia que da
perder soberanía aceptando esas
condiciones, es discutible si es
mejor o peor que las finanzas las
maneje el FMI o los funcionarios de
Macri.
En los últimos días volvieron a
aparecer los capitales espe-
culativos a aprovechar la tremenda
timba financiera que es hoy el país
y con las medidas de Caputo, co-
menzaban a utilizarse cientos de
millones de dólares para captar
capitales que sólo llegaban con
fines especulativos. El orga-
nismo internacional le impuso
a Macri que su plata no se
destine a eso y con la debili-
dad del Gobierno Nacional, ter-
minó renunciando Caputo.
El mayor problema no es la
renuncia, es la falta de credi-
bilidad que hay al respecto sobre
manejo de la economía. Los núme-
ros en la macroeconomía no están
tan mal. Lo mismo el mercado no
le cree a un Gobierno que sigue
haciendo pruebas de ensayo y
error.
Tras casi tres años de gestión, to-
davía hay incertidumbres respecto
a que si hay un plan económico o
se sigue insistiendo con espasmos
que terminan produciendo conse-
cuencias graves. Que en Buenos
Aires se llegue a cifras superiores
al 12% de desocupación, repre-
senta más de cien mil desocupa-
dos.
Y que se haya perdido al menos el
50% del poder de compra del sala-
versiones que el Gobierno baje la
inflación y consideró que
"la gran
parte del ajuste" en las tarifas
"ya pasó".
Aunque ahora con la
suba tan fuerte de la divisa nortea-
mericana, habrá que ajustar de
nuevo. Afirma que
"la inflación
es importante que baje" dado
que es "un impuesto muy dis-
torsivo que hace más difícil
planear, ahorrar y la decisión
de invertir".
Y asegura que
"es
importante que el aumento de la
inversión sea financiado por un
aumento del ahorro doméstico",
en referencia al "ahorro en el
sector público".
Y un tema que el Gobierno
tomó nota: la reducción del
déficit fiscal. El economista italiano
afirma que está bastante claro
dónde debe hacerse el ajuste
"si
se mira las áreas donde el gasto
público aumentó más en los últi-
mos 10 años".
Es decir, ajustes en subsidios, pla-
nes sociales y mayor cantidad de
empleados públicos.
La cuestión que la Nación va a
hacer esos ajustes trasladando
esos problemas a las provincias
que verán afectadas seriamente
sus cuentas públicas.
s
s
s
s
s
s
9
Roberto Cardarelli es el italiano que maneja las cuentas argentinas por orden del FMI
“
Para el economista
italiano del FMI,
el ajuste hay que
hacerlo en las áreas
donde aumentó el
gasto público en la
última década
Juan Carlos Bataller Plana
Juanca Bataller @ juancabataller
Juan Bataller
política