M
édico psiquiatra y psicoterapeuta,
especialista en Victimología, di-
rector de la cátedra UNESCO en
Argentina “Abordaje de la violencia, desafío
transdisciplinario” y presidente de la Funda-
ción Argentina de Acción Humanitaria
(FADAH), Juan López sostiene que no se
puede trabajar en el abordaje de las vícti-
mas sin las ciencias jurídicas, la medicina,
la psicología y los servicios sociales, y que
todos los actores intervinientes en el abor-
daje deben estar formados adecuada-
mente para evitar la revictimización de las
mujeres.
“No hay derecho a la equivocación con
las víctimas. Cuando una mujer es vio-
lada, en el medio público o en el seno
de la familia, somos todos responsa-
bles. El poder político debe estar com-
prometido. Debe haber una triangula-
ción entre poder político, salud pública
y ciencias jurídicas”,
sostiene.
—¿Cómo se comienza a trabajar por
una justicia más justa para las víctimas
en San Juan?
—Hay un adagio que dice no hay abordaje
de la víctima si paralelamente, desde el
punto de vista médico—psicológico, no hay
abordaje desde la justicia. Una violación
coloca a la mujer frente a la sensación de
muerte inminente, más allá que a posteriori
genere un psicotrauma de evolución cró-
nica, el andamiaje de armado va a ser a
vida, o sea hablamos de una vida que no
va a tener cura. La victimología sostiene
que escucharla, cuidarla y seguir todo un
sistema de protección, indica una devolu-
ción de la identidad. Las ciencias jurídicas,
el procedimiento penal, es el primer paso
para que la víctima recupere la identidad
perdida por el trauma.
—El abordaje de la víctima debe ser in-
tegral...
—La victimología no puede trabajar sin las
ciencias jurídicas, la medicina, la psicología
y los servicios sociales. El abordaje de la
víctima debe ser integral, de manera siste-
mática y ordenada. Sin esto, no hay trata-
miento. Si tomamos el caso de las mujeres
que por diferentes razones son atacadas: o
porque son mujeres, en lo que se llama
violencia de género, o por un perverso nar-
cisístico con acompañamiento psicopá-
tico o por un psicótico —porque en
realidad la reacción de los hombres tiene
que ver con un gran capítulo que se llama
psicopatías con fondos de perversión—, te-
nemos abandonadas una cantidad impor-
tante de mujeres frente a estas estructuras
de personalidades, que van más de la vio-
lencia de género y son formas de ocasio-
nar daño. Cuando matan a una mujer en el
seno de una familia y hay hijos, si nos los
matan realmente, los matan simbólica-
mente.
—En cualquier caso, los niños terminan
siendo las víctimas...
—Siempre decimos que en todo hogar
donde hay una mujer maltratada, insultada,
descalificada, abusada, abandonada, etc.,
hay niños maltratados. Esto es la génesis
del comienzo de los nuevos victimarios,
que no pueden escapar a este discurso de
violencia y agresión permanente. Estas si-
tuaciones no son trabajadas preventiva-
mente porque nuestros sistemas de salud
y de justicia están colapsados hace mucho
tiempo. Frente a semejante colapso, no
hay indicadores de que nosotros, como
seres pensantes, con responsabilidades
que nuestros diplomas nos llevan a profun-
dizar, hagamos los cambios necesarios
para que estas situaciones se vayan modi-
ficando.
—¿Cuáles serían los cambios que nece-
sita la justicia sanjuanina?
—San Juan no está exenta de lo que pasa
en el país y un ejemplo es la viuda de (fis-
11
JUAN LÓPEZ, PSIQUIATRA ESPECIALIZADO EN VICTIMOLOGÍA
“Cuando una mujer es violada,
somos todos responsables”
Viernes 11 de marzo de 2016
cal Alberto) Nisman, la jueza (Sandra)
Arroyo Salgado, quien siendo parte del sis-
tema, salió a decir que tanto ella como sus
hijas han sido abandonadas por la justicia.
Esto nos alerta de manera importante
sobre el déficit que tenemos en este nivel.
No hay jueces en el mundo desarrollado, ni
psicólogos, médicos victimólogos o servi-
cios sociales que no acrediten las forma-
ciones deontológicas necesarias para el
abordaje. La formación significa programas
basados en estadísticas serias de lo que
se debe abordar.
—Hoy no existen estadísticas.
—El Poder Judicial debe conocer los tiem-
pos y las formas para que se encuentre
con una primera declaración de la víctima,
cómo la va a proteger y cuidar para que no
sea sujeta a declaraciones reiteradas, a
estudios de peritajes reiterados, a reen-
cuentros permanentes con el victimario,
contraindicados en el campo de la victimo-
logía. Debe saber que las audiencias de
conciliación o mediación están contraindi-
cadas en estos casos. No podemos ser
agentes de sobre victimización perma-
nente, de maltrato de la mujer dentro del
sistema. No hay derecho a la equivocación
con las víctimas. Cuando una mujer es vio-
lada, en el medio público o en el seno de la
familia, somos todos responsables. No
habrá evolución mientras esto se tome de
manera dispersa, con comentarios que son
espasmódicos. El poder político debe estar
comprometido. Debe haber una triangula-
ción entre poder político, salud pública y
ciencias jurídicas.
—¿No tener estadísticas implica que
podría haber más víctimas que no son
reconocidas dentro del sistema?
—No hay ninguna salud pública del país
ocupada del problema víctimas, con pro-
gramas de conocimiento. Hay víctimas en
el campo de la traumatología, los traumató-
logos pueden ver chicos con lesiones de
diferente índole, producto de agresiones;
hay víctimas en el campo de la ginecolo-
gía, casos de mujeres abusadas o violadas
que pueden ser silenciados; hay víctimas
en el campo de la clínica, con manifesta-
ciones somáticas, y en el campo de las
adicciones, como secundarismo a proble-
mas victimológicos graves. Somos una
caja de resonancia, lo que no resolvemos a
través de la psiquis, lo manifestamos a tra-
vés del cuerpo. Pero además es central la
formación de todas las ciencias jurídicas.
La restricción perimetral, los mil metros no
significan nada, señor juez, si usted no ma-
neja la psicopatía de la perversión. El pe-
riodismo también está incluido en esto.
Hay que bajar los niveles de prensa amari-
lla y las reacciones espasmódicas que ésta
hace hablando y hablando y después se
calla. Hace verdaderos shows mediáticos,
que escapan mucho a las recomendacio-
nes de Naciones Unidas sobre lo que se
debe hacer en victimología.
El psiquiatra, especialista en
victimología, expresa que los
sistemas de salud y de justi-
cia están colapsados y no
pueden dar respuestas a las
víctimas. Asegura que el
poder político debe estar
comprometido con esta pro-
blemática para realizar los
cambios necesarios que pue-
dan modificar esta realidad.
“
”
Las ciencias jurídicas,
el procedimiento penal, es
el primer paso para que la
víctima recupere la identi-
dad perdida por el trauma
“
”
No podemos ser
agentes de sobre
victimización permanente,
de maltrato de la mujer
dentro del sistema.
El psiquiatra
Juan López
propone crear
un instituto de
victimología
para toda la
región Cuyo.