El Nuevo Diario - page 14

S
an Juan empezaba a levantarse
luego del terremoto de 1944
cuando un grupo de inmigrantes
españoles, munido de un fuerte volunta-
rismo y un puñado de sueños, decidió
crear la Sociedad de Beneficencia del
Hospital Español en 1948.
Hoy, casi 70 años después y luego de per-
manecer varios años intervenido, el Hospi-
tal Español fue liquidado y sus 90
empleados esperan ansiosos un inversor
que decida hacerse cargo, aunque es muy
probable que sea la provincia quien lo
compre con el objetivo que el edificio se
transforme en un hospital de niños.
Un pasado glorioso
P
atrimonio de la Sociedad de Bene-
ficencia, el hospital fue concebido
como un bien privado que brin-
daba un servicio público.
Uno de los socios donó el predio donde
está ubicado y otros aportaron su trabajo
voluntario y dinero para concretar la cons-
trucción, que diseñó el arquitecto Bellelli.
En su organización, estaba a cargo de un
director médico a quien la Sociedad le
daba un poder de administración por de-
terminado tiempo. Durante varios años el
doctor Cristóbal Sánchez Sureda (ya falle-
cido) fue el director y quien en conjunto
con la comisión directiva de la Sociedad,
encaminó el lugar hacia el crecimiento.
El gobierno español aportó subsidios
desde la Junta de Andalucía o de su Con-
sulado en Cuyo, a través del vicecónsul
en San Juan, Felipe Serer.
El principio del fin
E
n los ’90 el sistema de salud sufrió
un cambio drástico, que llevó a la
tercerización de servicios y generó
déficits que el hospital no llegó a cubrir.
Después de la muerte de Sánchez Su-
reda en 2006 y la designación de un su-
cesor, la comisión directiva tuvo que
buscar apoyo de contadores para intentar
regularizar la situación económica.
En 2007, la Inspección General de Perso-
nas Jurídicas intervino la Sociedad, pero
los socios presentaron un recurso de am-
paro que el Juzgado de Primera Instancia
no hizo lugar. En diciembre de 2007, la
Sala 1 de la Cámara de Apelaciones en lo
Civil, Comercial y Minería falló a favor de
la Sociedad y el hospital le fue restituido.
La Fiscalía de Estado recurrió el dictamen
de la Cámara de Apelaciones e insistió en
la legalidad de la intervención ante la
Corte de Justicia de San Juan, que ratificó
lo actuado por Personería Jurídica.
En octubre de 2008, el exdirector de Per-
sonas Jurídicas, Pedro Santana, resolvió
una segunda Intervención.
Hasta hoy, cuando se decidió la liquida-
ción, pasaron dos interventores, los abo-
gados Hugo Russo y Jorge Serer, quien
elevó el dictamen final para que Persone-
ría Jurídica tomara la decisión de liquidar
el hospital. Hoy, Osvaldo Rebollo es liqui-
dador designado por el Estado.
Viernes 6 de mayo de 2016
14
HABÍA SIDO CREADO POR EL VOLUNTARISMO DE UN GRUPO DE INMIGRANTES EN 1948
—¿Te designaron interventor sin
saber la relación familiar que tenías
con el Hospital Español?
—Me convocaron por la experiencia que
tengo en asesorar instituciones espe-
cializadas en Salud, pero mi relación
con el hospital es casi de carácter gene-
racional. Mis abuelas, Rosa Reinoso de
Serer y Estrella Ramos de Borda, fueron
parte de la comisión directiva por largos
años, y también mi abuelo Felipe Serer,
que fue vicecónsul de España en San
Juan. Había una puesta muy romántica,
con un gran sentido del voluntariado
que se trasuntó en varias generaciones.
— ¿Cuál era la situación en el 2015,
cuando asumiste?
—Me encontré con un gran pasivo con
AFIP y pudimos generar un plan de
pago. Busqué dónde había salidas de
dinero no bien controladas y cuáles sec-
tores eran deficitarios o estaban dimen-
sionados y realizamos ajustes.
Concientizamos al personal de que la
única forma de salir era trabajando. Se
conformó un buen ambiente de trabajo
con todo el personal. La prueba es que
la disolución no causó un estruendo
entre los empleados, un poco porque
también el Estado salió a comunicar su
decisión de hacerse cargo.
—Dejar a 90 personas sin trabajo en
esta coyuntura no era una decisión
fácil de tomar...
—Hubo una gran contención de las au-
toridades estatales, velando por los inte-
reses del hospital, donde no sólo hay
empleados sino también médicos y ser-
vicios tercerizados con su propio perso-
nal. Buscaron la solución menos
drástica, que menos daño podía causar
en esta situación de déficit estructural,
que creo que vino por algunas adminis-
traciones precedentes que no fueron
muy diligentes. La demanda de servicios
viene dada en la respuesta que uno da y
estas distorsiones que generaron las in-
tervenciones, hicieron que el hospital no
fuera un lugar de elección y por lo tanto
perdió la buena fama y no se pudo re-
montar.
—Se habló de un pasivo de 38 millo-
nes ¿es así?
—Hay un gran pasivo con AFIP de 25
millones de pesos que están en un plan
de pago vigente. En la composición del
pasivo se ponderan los resultados de los
juicios en que la Sociedad fue deman-
dada o co—demandada con montos ac-
tualizados, como también algunos
despidos, con lo cual los pasivos contin-
gentes, engrosan el número y llegan a
esa cifra aproximada.
—¿Lograste algún aporte del Estado?
—No. Los sueldos se pagaron con los
aportes del hospital. Se llegó a un
acuerdo con los empleados para cobrar
en dos veces, como por quincena. No
entramos en ningún procedimiento de
crisis para no bajar sueldos. Hicimos un
intento con el Ministerio de Trabajo de la
Nación para obtener algún tipo de plan,
como REPRO, pero no se pudo obtener.
—¿Cómo se llega a esta decisión de
liquidar?
—Presenté varios informes. Dije que
venía de muchos años de intervención y
que se había agotado como instituto jurí-
dico. Advertí del gran pasivo con AFIP y
que no había forma de revertir estos pa-
sivos si no era con la ampliación de ser-
vicios con inversión genuina. Los
ingresos que tenía el hospital no cubrían
los costos. Desde el 2011 no había regis-
tro de pago de socios, que es una causa
para la extinción. En este marco, se
hacía imposible seguir.
—¿Cuáles son los pasos a seguir
ahora?
—El procedimiento de extinción y liquida-
ción es tendiente a realizar el activo para
cancelar el pasivo. Se tabuló no desgua-
zar el hospital sino buscar oferentes que
cumplan tres requisitos esenciales: la
asunción del personal, de la deuda y
mantener el destino del inmueble para
salud.
Dr. Jorge Serer –Último Interventor del Hospital Español
“Hubo una gran contención de
las autoridades estatales”
Llevaba años intervenido y
tenía un pasivo cercano de
los 40 millones de pesos. El
gobernador anunció la
intención que la provincia
se haga cargo.
El Hospital Español fue liquidado
Fundado en 1948, el Hospital Español estaba intervenido desde el año 2007 por la Inspección General de Personas Jurídicas.
Jorge Serer, el abogado que fue el
último interventor.
1...,4,5,6,7,8,9,10,11,12,13 15,16,17,18,19,20,21,22,23,24,...36
Powered by FlippingBook